El trabajo artístico del cuero en los cordobanes andalusíes del califato cordobés, fue introducido en la península a través de la cultura árabe, y fue Córdoba su centro de mayor producción.

Los cordobanes tienen su origen en la capital del califato cordobés y se conocían como tales las pieles de macho cabrío curtidas con zumaque, planta rica en taninos curtientes que daba a los cueros mayor flexibilidad y resistencia.  ​​

​Los de mayor prestigio eran los cordobanes ornamentados. Para ello se utilizaban diferentes técnicas como trazado, modelado, repujado, incisado, calado, tallado, ferreteado, etc., con las que se elaboraban sillerías, arcones, cofres y encuadernaciones, entre otros objetos.